Jericoacoara, un pequeño pueblo paradisíaco en el norte de Brasil, entre dunas.

 

Jericoacoara

 

Jijoca de Jericoacoara se ubica en el extremo oeste de la costa del estado de Ceará, a 300km de la capital, Fortaleza. 

Jeri cuenta con un aeropuerto regional, pero con pocos vuelos. La mejor opción es el Aeropuerto Pinto Martins, en Fortaleza. Desde allí, es posible alquilar un vehículo 4x4 para llegar a Jijoca.

En este municipio encontraremos la famosa playa de Jericoacoara, o Jeri, como es apodada, que es reconocida internacionalmente como una de las 10 playas  más bellas del mundo.

Jericoacoara hasta hace poco tiempo era un pueblito aislado del mundo, donde sus habitantes en su mayoría pescadores, llevaban una vida simple rodeada de lo más hermoso de la naturaleza. Con el correr de los años, este paraíso fue abriéndose al mundo a través del turismo, aunque siempre se buscó preservar el entorno natural y la magia del pueblo intacta.

Jericoacoara tiene la particularidad de estar incomunicada, sin caminos que la conecten a los pueblos cercanos. Allí sólo se puede llegar a través de las dunas, en vehículos especiales, o por la playa, es un oasis entre las dunas de arena blanca, como una joya preciosa en el corazón de Parque Nacional de Jericoacoara.

Preserva lagunas cristalinas de agua dulce, playas de arena y médanos blancos, que se extienden por kilómetros, con vista libre, y manglares, que completan la fórmula que hace del lugar un verdadero pedazo del paraíso. Un verdadero paraíso natural preservado que aún refleja la sencillez del antiguo pueblo de pescadores bañado por los colores y luminosidad característica del noreste Brasileño, el alumbrado público está prohibido por la ley local. La luz de la luna y de las estrellas se encarga de la iluminación y del encanto.

Con calles pavimentadas con arena, la vida toma un ritmo mucho más lento. Sin tráfico, sin líneas, sin bocina, sin estrés. Pero cuidado, si usted es como la mayoría de los visitantes, asegúrese de reservar más días, ya que seguramente deseará extender su estancia.

El clima es seco y la temperatura oscila entre 25 º - 31 º C durante todo el año. El agua de mar es siempre cálida y sus colores varían desde verde esmeralda al azul.

El lugar lleva el beneficio de los vientos alisios, que soplan constantemente entre julio y diciembre haciendo su playa una de las más buscadas para la práctica de windsurf y kitesurf en el mundo entero.

Tiene también el privilegio de estar situado dentro del Parque Nacional, un  área ambiental rodeada de interminables playas, dunas y la colina  del "Serrote" de 93 metros sobre cuya base se encuentra la famosa “Pedra Furada” o Pedra do Frade,un hueco en medio a una roca que, en el solsticio de invierno, exhibe el sol en su apertura esculpida por la fuerza del mar. ¡Un verdadero espectáculo!

Otro programa imperdible es el amanecer visto desde lo alto del Médano de la Puesta del Sol (Duna do Pôr do Sol, en portugués), que es tan espectacular que siempre recibe aplausos.

A 25km se encuentra Tatajuba, un deleite en forma de playa, médanos y lagunas.

Visita también la Praia do Mangue Seco, enclavado entre las dunas y el manglar, donde podrás hacer un paseo en barco y apreciar los caballitos de mar en su hábitat natural.

Debido a las restricciones de construcción y las leyes de protección ambiental,  está creciendo de manera positiva.

Los dueños de negocios, que cumplen con los requisitos y desean igualar la belleza y simplicidad de Jeri, han creado posadas pequeñas y acogedoras, que ofrecen encanto y sofisticación en lugar de inmensidad o extravagancia.

Otra razón que le permite a Jeri mantener su estilo de vida pacífico y sin prisas es el viaje excepcional que se necesita para llegar hasta aquí. Debido a la ubicación remota de Jeri, la última hora del viaje debe hacerse en vehículos con tracción 4×4 a lo largo de escarpadas carreteras de tierra y luego a lo largo de la playa de arena fina.

 

 Clima & Cuándo ir a Jericoacoara

Jericoacoara es un destino que se puede visitar todo el año. La temperatura varía entre los 22°C en invierno y los 35° C en verano.

Si bien la época de lluvias ocurre entre enero y junio, eso no significa que pasen días enteros lloviendo sino que llueve de a ratos y el sol termina apareciendo.

Las vacaciones de julio, la Reveillón y el Carnaval son considerados temporada alta y la villa se llena de turistas brasileros y entre julio y noviembre es la temporada de kite donde se llena de extranjeros. Tener en cuenta también los fines de semana largos.

Si querés evitar el viento, no vayas principalmente durante el mes de agosto cuando sopla bastante y es cuando van los deportistas para hacer kite e windsurf ya que es uno de los mejores lugares del mundo para practicarlo.

 

Qué hacer en Jericoacoara:

 

⭐ AL ESTE DE LA CIUDAD DE JERICOACOARA

The Arched Rock o Pedra Furada se ha convertido en el símbolo de Jericoacoara. 

Caminando hacia el este desde la ciudad a lo largo de la línea de costa, primero pasará por Malhada Beach, que es una pequeña playa, popular entre los surfistas y windsurfistas.

Continuando por 2 km al lado del agua (si la marea lo permite), o tomando el camino más alto a lo largo de la colina de Serrote, pasará por acantilados rocosos y una costa de gran belleza. La caminata dura aproximadamente 2 horas en total, una hora para llegar, una hora para regresar.

Si la formación rocosa no emociona, lo más, ciertamente, las hermosas vistas desde todas las direcciones hacen sentir como si hubieras llegado al borde de la tierra. Si te encuentras en Jeri entre el 15 de junio y el 30 de julio, tendrás la suerte de presenciar el atardecer justo en el medio del Arco; es una excelente oportunidad para tomar fotos.

El faro está situado en la parte superior de la colina Serrote (alrededor de 100 metros de altura). Los paseos a caballo a menudo terminan ahí, ya que ofrece una vista de 360 grados de Jeri y sus alrededores.

⭐ AL OESTE DE LA CIUDAD JERICOACOARA

Al oeste de la «duna de la puesta del sol» hay un tramo de playa aparentemente interminable, donde la gente disfruta paseando, trotando o montando a caballo.

Mangue Seco está a 5 kms de Jeri a lo largo de la playa. Es un pequeño pueblo de pescadores que alberga un pequeño lago de agua dulce. A medida que se acerque, verá el surrealista bosque de mangles muertos, por lo que se ganó el nombre de «mangle seco«.

Continuando hacia el oeste a lo largo de la playa llegarás a Guriu, otra pequeña comunidad de pescadores, que se encuentra junto a la desembocadura de un pequeño río. Esta, marca el límite occidental del Área de Protección Ambiental.

Es en este punto donde puedes alquilar una de las tantas balsas que llevan pasajeros al otro lado del río. También puede contratar a un pescador que lo lleve a través de los manglares para echar un vistazo a los caballitos de mar que viven allí en abundancia.

Además, también está Tatajuba, un pueblo aproximadamente ubicado a 25 kms de Jericoacoara, accesible en buggy o vehículo de tracción 4×4, que cruza el río y atraviesa las dunas. Algunas de estas dunas pueden pasar por un proceso de cristalización, a veces revelando pequeñas esculturas de arena.

Tatajuba también alberga una mágica laguna de agua dulce, donde se puede tomar un paseo jangada; comer pescado fresco mientras holgazanea en una hamaca que se sumerge cómodamente en el agua.

⭐ AL SURESTE DE LA CIUDAD JERICOACOARA

Realice un emocionante paseo en buggy (40 min a 1 hora) a través de las dunas y será recompensado con una laguna de agua dulce. Lagoa Azul y Paraíso se encuentran uno al lado del otro y comparten la misma arena blanca y las tranquilas aguas azules brillantes.

Encontrará un par de restaurantes junto a la playa que ofrecen deliciosa comida y un lugar para relajarse bajo una palapa con sombra. Estas lagunas podrían tener un volumen de agua reducido debido al clima seco en la zona.
Puede que no sea el destino más fácil de encontrar, pero una vez que esté allí, se dará cuenta de que valió la pena cada minuto del viaje. Es un lugar único, y es así porque es tan remoto y está oculto del resto del mundo.